La mayoría de las personas que desean estudiar y trabajar en el exterior piensan únicamente en el programa académico y como este impactará en su formación profesional. No obstante, es una experiencia que beneficia mucho más que solo tu hoja de vida.
Si tienes dudas sobre cómo estudiar fuera del país podrá transformar tu vida, acá te damos los 7 mayores beneficios de estudiar un idioma en el exterior para que te animes a planificar tu viaje de estudios.
1. Perfeccionamiento de un nuevo idioma
Aprender o perfeccionar un idioma en el extranjero es mucho más efectivo que hacerlo con un curso en nuestro país. Vivir en un lugar donde se comunican con ese idioma te obligará a estar inmerso en él todos los días y enfrentarte a situaciones cotidianas en las que debas practicar al máximo para hacerte entender.
Adquirir la fluidez en el idioma no se logra con un curso sino con la constante práctica; es por esto que muchas personas estudian un idioma por años y nunca logran hablarlo fluidamente como una persona que vivió y lo aprendió por fuera.
2. Aprendes a lidiar con tus responsabilidades
Para quienes aún viven con sus padres, un intercambio puede ayudarles a tener nuevas responsabilidades y darles una muestra de lo que es la vida de una persona adulta con todas sus libertades pero también sus responsabilidades.
Durante la experiencia, tendrás que realizar tares domésticas y administrarlas con el tiempo de estudio y ocio.
Si decides trabajar las responsabilidades aumentan; aprenderás en la práctica a conllevar trabajo, estudio y ocio. Pasar por todo esto en otro país trae una maduración única.
Es claro que todo intercambio tiene su lado placentero de fiestas, paseos etc pero sin duda alguna tu regresarás como una persona mas responsable y consciente.
3. La nostalgia nos une
Una de las mayores resistencias de quien desea hacer un intercambio pero aún no lo ha hecho es alejarse de su familia y amigos.
La idea de tomar un avión e ir a un país desconocido donde no verás caras familiares podrá asustarte pero la nostalgia de extrañarlos podrá acercarlos y fortalecer esas relaciones.
Muchos cuentan que por la nostalgia que se siente o por la necesidad de hablar todos los días con los padres, a su regreso se sintieron más conectados y cerca de ellos.
Un tiempo lejos de la familia y amigos hará que se valore aún mas a esas personas importantes de nuestra vida.
4. Ninguna experiencia será igual
Lo que somos es el resultados de diversas experiencias vividas en diferentes etapas de nuestra vida: durante el colegio, la universidad, el trabajo, la vida personal, las relaciones amorosas etc.
Vivir en el exterior es una experiencia única que afectará positivamente quien eres: Nuestra mente se abre, cambiamos la forma de pensar, nos enfrentamos a procesos nuevos. Todo esto no podría ser conquistado si no hubieras salido de tu zona de confort, dejando tu país por un tiempo, aprendiendo un idioma diferente a tu lengua materna y estando lejos de tu familia y amigos.
5. Aprender a tomar decisiones
Muchas veces cuando estamos dentro de nuestro entorno nos acostumbramos a consultar con familia o amigos todo tipo de decisiones, lo cual hasta cierto punto esta bien; pero después nos genera inseguridades y temores para la toma de decisiones.
Cuando vivimos fuera del país nos tenemos que enfrentar a situaciones nuevas que requieren que tomemos decisiones rápidamente y sin mayor consulta a terceros. Lo anterior nos fortalece como individuos ganando independencia y confianza en nosotros mismos; lo que antes nos producía incertidumbre ahora nos da seguridad y auto-gestión.
6. Descubrirte a ti mismo
Es increíble lo que la rutina, monotonía, hábitos pueden generar en las personas. Muchos de nosotros ya tenemos comportamientos robotizados que han sido instalados en nuestro ser a lo largo de la vida.
Al vivir fuera de tu país y en un entorno completamente nuevo; tus sentidos e instintos se agudizan para vivir al máximo cada instante. Lo que antes veíamos gris ahora lo observamos en miles de colores; lo que antes creíamos que ya habíamos explorado ahora nos resulta diferente y novedoso.
Un viaje de estudios al exterior nos despierta de un letargo y nos invita a que descubramos cosas de nosotros que nunca creíamos que teníamos. Conoce no sólo el mundo en el que vives sino tu mundo interior !
7. Conviértete en un ciudadano del mundo
Los viajeros no deben tener solamente un ímpetu de aventureros sino dejarse tocar por toda esa energía que emana una nueva cultura, nuevos paisajes, nuevos amigos, nuevas rutinas, nuevos sabores etc.
De seguro tendrás días duros, melancólicos, tristes etc. Pero te garantizo que serán muchos más aquellos días llenos de luz, asombro, diversión por descubrir cosas nuevas.
No dejes pasar el tiempo en ideas que quedan solo como planes, atrévete a descubir, a tocar, a probar, a viajar y a transformarte por dentro. Despídete de ese acompañante apático e imaginario y sal al mundo que está afuera y que espera para que lo conquistes!